2 Lezama | Gerra Civil y Posguerra

El recuerdo de la guerra es demoledor, inolvidable. Los nacionales entraron en Lezama atravesando el cinturón de hierro, el 13 de junio de 1937, día de San Antonio. Seis días más tarde cayó Bilbao. Han transcurrido muchos años pero aquellas vivencias siguen en la memoria: el despiadado bombardeo de Gernika, los destrozos y estragos ocasionados por las bombas en la propia localidad, los muertos, las dramáticas carreras a los refugios, el éxodo a otras localidades... La guerra fue dura, terrible, cruel... Pero no fueron mejores la posguerra y la larga dictadura de Franco que le sucedieron. Las largas estancias en la cárcel, el exilio, la falta de dinero, la penuria y la pobreza, las cartillas de racionamiento, la entrega de las provisiones en Abastos, las prohibiciones, los castigos... Y un largo sinfín que hacen que lo vivido sea imposible de olvidar. Afortunadamente, aquellos tiempos se fueron para siempre.